miércoles, 25 de marzo de 2009

Consejos de Moda

Por Angelar la Fashionable.

Mis más estimados amigos y amigas. De vez en cuando no va mal hacer pequeñas incursiones por el mundo de la frivolidad y venerar aquello que es efímero y superficial. Me he permitido, asi pues, desperdiciar algo de mi tiempo escribiendo sobre un tema concupiscente, pero que igualmente me mantiene entretenida sin dejar que mis neuronas mueran por aburrimiento mientras me trago, literalmente, toda la bazofia de shows televisivos con los que nos bombardean hoy en día. Antes de todo, he de comunicar que la chispa que me ha impulsado a escribir esto es que he sido recientemente rebautizada como Angelar la Fashionable en un extraño movimiento que va camino ahora de alcanzar todo su esplendor (véase, http://congregacionbarroquista.foros.ws/index.php Join it!).
Por lo tanto, he decidido hacer honor al adjetivo que acompaña mi nombre y escribir (parodiando en cierta medida) algunos de mis conocimientos sobre moda y estilismo que he ido adquiriendo a lo largo de los años, gracias a seguir con atención los diseños de alta costura que aparecen en las grandes pasarelas y a las advertencias que mi sabia madre me ha hecho desde que era pequeña, con el propósito de que no me convirtiese en una "Juani" cualquiera. Pido disculpas por adelantado por si alguien no cumple alguno de los puntos que voy a exponer a continuación y se siente ofendido por mi crítica. El primer paso para abandonar toda horteridad es ser consciente de los errores propios y no volver a cometerlos. Si aún así, el lector no comparte mis ideas y piensa que por llevar una minifalda con tacones de charol rojos la susodicha NO es una perfecta mascachapas, no importa… Esto no es más que mi visión particular del apasionante mundo de la estética, las tendencias y los trapitos varios.
LA MINIFALDA, esa delicada prenda.
Solo al alcance de algunas pocas, la minifalda es una prenda cuya cantidad de tela debe ser directamente proporcional a la cantidad de celulitis de su portadora. Si, las que como yo, somos unas grandes fanáticas de la protagonista de este punto, nacida en los 60-70, pero no poseemos medidas perfectas ni piernas de infarto, la mejor opción es combinarla con unos leggins que limen nuestros defectuosos muslos y regularicen la piel de naranja. Si aun así sentimos incontenibles deseos de mostrar nuestras extremidades, es mucho menos peligroso hacerlo en verano, con una minifalda moderada que nunca suba más allá de la mitad superior de nuestros muslos, o utilizarla solo en zonas playeras, donde las prendas con escasa tela están más permitidas, sin correr el riesgo de autoetiquetarnos como "lobas de aquí te quiero ver" al utilizar una de ellas. Hay tejidos incompatibles de "per se" con esta prenda (charol rojo, cuero negro…)
SI ENSEÑAS PECHO, NO ENSEÑES PIERNA, Y VICEVERSA.
Quizá una de las pocas frases sensatas que han salido de los labios de Victoria Beckham, pero que se ganó mi beneplácito en cuanto la escuché. Continuando en cierta forma con el apartado anterior, si al final decidimos mandar todo al carajo y ataviarnos con una bonita y vistosa falda corta, nunca, bajo ningún concepto y pena de muerte, debemos combinarla con una camiseta que muestre parte de nuestros encantos superiores. Si queremos continuar siendo tan fashionables como dignas de ello, lo mejor es cubrir nuestro tronco con una camiseta cerrada. Una de las mejores opciones es un jersey fino de cuello cisne para el invierno, cosa que dará un toque muy setentero a nuestro estilismo. Al igual que lo dicho anteriormente, podemos tomar las zonas playeras como excepciones a la regla, pues es un lugar donde la legislación estética es mucho menos estricta. Así, si tras estar tomando el sol decidimos que nos apetece un helado, podremos acudir al quisco más cercano con una minifalda, o un pareo en su defecto, y la parte superior de nuestro bikini, mostrando nuestras carnes sin correr el riesgo de dar una imagen equivocada de nosotras mismas. Ahora bien, si aceptamos esta indumenta para esta ocasión, mi más sincero consejo es que al acudir al quiosco sustituyamos el helado por un botellín de agua fresca, si no queremos que nuestro tejido adiposo aumente de volumen contra nuestra voluntad.
Por otra parte, un escote generoso siempre deberá ser acompañado por unos bonitos pantalones largos, por ejemplo, o una falda que llegue más allá de las rodillas. Jamás de los jamases utilizar un Wonder bra en este caso. Mucho mejor es la opción de buscar un sujetador discretito que no nos las ponga en bandeja. Claro está, si la intención de la persona es pillar cacho en alguna discoteca barata, es mejor olvidar todo lo que he dicho. Allí solo desentonaríamos si no las tuviéramos en la garganta.
Solo si somos modelos de 1,80 de estatura y 45 kilos de peso desfilando para Galliano o Caballi podremos infringir la crucial norma Victoriana, aunque es muy probable que en ese caso no lleguemos a nuestro destino y nos desvanezcamos por el camino por falta de glucosa en nuestro cerebro, o directamente por agotamiento de recursos lipídicos de nuestras reservas. Muy posiblemente también nos tumbe una ráfaga de viento.

LOS TACONES, dejando a un lado los Manolo’s.
No tan delicados como la minifalda pero igualmente peligrosos si no se saben combinar. Los tacones son un complemento realmente útil: casi cualquier conjunto "casual" puede metamorfosear a elegante si se acompaña de algún modelo de zapatos de esta especie. Ahora bien, los tacones nunca deben ser utilizados al mismo tiempo que las más que citadas minifaldas, shorts, tops (que, por nuestro bien, no debe ser empleado nunca fuera de un gimnasio), o prendas análogas. Además, la longitud del tacón debe ser moderado salvo excepciones como grandes eventos, no pasando de los 7 cm. Como los zapatos de tacón de aguja y acabados en punta son especialmente controvertidos, aconsejamos optar por los de tacón ancho y punta redondeada, muy de moda en la actualidad.
Importante también la acústica del tacón: es hermoso que un tacón suene, pero sin sobrepasar el límite. Si vamos más allá de éste, la cantidad de decibelios emitidos por nuestros pasos será inversamente proporcional al glamour que nos envuelva y nuestra llegada será anunciada inevitablemente mucho antes de que se produzca.

LOS COLORES, hermoso regalo para nuestra vista.
El negro siempre es la mejor opción para resultar elegantes. Pero si no estamos de luto ni somos simpatizantes de esta práctica, podemos encontrar este monocromatismo aburrido y monótono. No olvidemos que la vida no es en blanco y negro, sino que es en color, y que la evolución (o "Dios" si preferís llamarlo así) nos ha dotado de unos maravillosos ojos que pueden captar las diferentes longitudes del espectro de luz visible y regocijarse en ellas. Aquí van algunos de los colores que pueden incrementar nuestro atractivo si son empleados convenientemente.
Rojo: si bien no es mi color favorito, he de decir que a las morenas es uno de los que más nos favorecen. Nos llenan de energía y nos hacen sentir sexies. Un rojo oscuro, rayano al granate es la mejor opción, por ejemplo, para camisetas, jerseys o rebecas. Evitar el charol de este color en la medida de lo posible.
Verde: los verdes claros favorecen mucho más a las rubias, sobre todo si sus ojos son de ese tono. Cuidadito con que otros colores se combinan. Suelen quedar muy bien con cítricos (dícese del amarillo y el naranja).
Blanco: ideal para el verano, en faldas ibicencas, camisas del mismo estilo o pitillos extremados. Nunca usar con ropa interior negra debajo. No olvidemos que las Juanis acostumbran a llevar pantalones de este color sobre tangas negros :S
Morado: soy una gran defensora de este color. Si combinamos la amplia gama de violetas, lilas y morados rosados podemos conseguir un aspecto elegante al tiempo que algo tribal. Recordar que el púrpura era uno de los tintes más caros del Medioevo y siglos posteriores, de forma que solo grandes personalidades como los cardenales se lo podían permitir en su ropa.
Dorado: ¡Ja! :P Hermoso color, pero que si es utilizado sin conocimimento puede hacernos parecer una burbuja Freixenet, en el mejor de los casos (en el peor de ellos alguna amiga hortera de Paris Hilton). Mi consejo: si nos encanta y no podemos resistir la tentación, utilizarlo solo en pequeños detalles y contadas ocasiones. Por ejemplo, unos zapatos dorados, una diadema, un bolso o una camisa en un oro sufrido si vamos a una fiesta… Si corremos la gran suerte de ser invitados/as a la gala de los Oscars o alguna del estilo, podemos ser un poco más generosos y llevar alguna prenda más significativa de dicho color, siempre y cuando no descuidemos el diseño de ésta.
Plateado: lo comentado con el dorado sirve igualmente con el plateado (¡Ja!x2). Aunque hay un dicho bastante extendido que afirma que "oro y plata, mala pata", no lo apoyo, pues ambos colores, combinados, crean un efecto visual muy logrado si están en su justa medida. Simpatizo infinitamente más con éste. (¡Ja!x3)
Amarillo: dependiendo de la prenda/objeto que se impregne de dicho pigmento, conseguiremos dar una impresión u otra. Por ejemplo, y aunque no venga demasiado al caso ejemplificar con automóviles, no es lo mismo un SEAT ibiza amarillo que un mini amarillo… Si bien el primero es digno de un mascachapas y su novia la Juani, el segundo resulta infinitamente más chic.
Naranja: no pasarnos con él, a no ser que deseemos ser confundidos con el butanero del barrio, o con la bombona de butano en sí.
Azul: sus efectos son muy dispares. Mientras un azul marino se asemejaría bastante a un negro, dándonos un toque de elegancia, un azul celeste es inmensamente más jovial y combina en las rubias igual de bien que los verdes claros.
Marrón: color perfecto para ser usado en otoño. Y su nivel de perfección aumenta si se combina con ocres. La pana y el ante son los tejidos de color marrón por excelencia. ¡Cuidadito con las manchas en estos tejidos!

EL PEINADO.
Son muchos los peinados pueden resultar acertados y elegantes, dependiendo de la ocasión. Veamos ejemplos.
Una cola de caballo puede ser muy bonita si no está demasiado estirada ni se combina con clips grandes o turbantes (práctica muy "Juani"). El coletero, cuanto más fino, mejor. Patricia Conde suele llevar colas sumamente acertadas.
Moño a lo Audrey-Herpburn, ideal para eventos nocturnos. Aunque no lo he comentado hasta ahora, Audrey era una persona inigualable en cuanto a estilismo y estética. Su imagen es objeto de culto incluso ahora, más de 15 años después de su muerte, y es una de las pocas actrices que jamás erró en alguna de sus elecciones en cuanto a indumenta se refiere, confiando en el genial Gyvenchy para casi todos sus vestidos. Cualquier cosa negra con la que cubramos nuestro cuerpo si llevamos uno de estos moños nos elevará a lo más alto.
Pelo corto-chic. Aunque las melenas suelen resultar atractivas para los hombres, la pura verdad es que el pelo corto suele renovar el aspecto e impregnar de jovialidad a la mayoría de las mujeres. Solo las más atrevidas deciden dejarse un corte andróginamente chic. Ideal para las personas con cuello esbelto, y combina de maravilla con pañuelos anudados en él.
Mechas. Práctica de alto riesgo. Emplear solo a modo de reflejos en tonalidades similares a nuestro color. Por ejemplo, si tu melena es negra, QUEDA TERMINANTEMENTE PROHIBIDO (y aquí si que utilizo la palabra PROHIBIDO) hacerse mechas rubias. Unas de color rojo apagado son mucho mejor opción. Si tu melena es castaña, las rubias no quedarán tan mal, dependiendo siempre del castaño y del rubio en sí. A las pelirrojas, les va que ni pintado unas de color cobre. A las super-mega-blondies-osea, mechas rubias de un tono más suave ponen la guinda a sus melenas.
Melena al viento. Nos dota de un cierto toque salvaje. Es una de mis favoritas.
Dos coletas/trenzas/pirris. Perfectas para dar un toque Lolita a nuestra estética. Van de maravilla para llevar a diario si nos identificamos con ese estilo. Mi consejo: usar cada coletero de un color. Pero solo si estamos de acuerdo con ello. No es algo obligatorio.
MAQUILLAJE.
Mala es su carencia, pero TERRIBLE Y HORROROSAMENTE peor es su exceso. Si no queremos parecer monitos de feria, nunca debemos pasarnos con él. Si somos mujeres jóvenes en plena flor de la vida, lo más acertado es un toque en los ojos y otro en los labios, añadiendo quizá algo de rubor en nuestras mejillas cuando nos vayamos de fiesta. Para las morenas un ralla negra en el ojo y un rojo amarronado en los labios es ideal de la muerte. Para las rubias, los grises azulados y los rosas, respectivamente, son infinitamente mejores. No olvidar nunca un perfilador de labios que defina el contorno de estos, pero teniendo en cuenta que el tono empleado debe ser muy similar al del tono del pintalabios. Un perfilador oscuro utilizado alrededor de un pintalabios claro no es NADA recomendable (muy típico de nuestras anti-cristos las Juanis). Y por supuesto, si Dios nos ha dotado de unos labios finos muy alejados de los carnosos de Angelina Jolie, don’t worry, los labios finos son hermosos igualmente y perfilarlos por fuera solo conseguiría darnos un aspecto de monigota malpintada sin espejo.
En cuanto a los ojos, el eyeliner es la mejor opción para conseguir una raya definida, pero el lapiz clásico es más recomendable para un aspecto más natural. Las sombras son ideales para poner la guinda. Cualquier revista suele tener truquitos bastante acertados sobre el tema.
Por supuesto, nunca olvidar nuestros rasgos a la hora de pintarnos, y utilizar aquellos colores y formas que más nos favorezcan. Más importante que maquillarnos como nos guste, es maquillarnos de forma que nos saquemos el punto. Esto depende de cada una, y solo se descubre consultándolo al espejo de nuestro cuarto de baño. Requiere horas de entrenamiento.
No debemos olvidar nunca que sin maquillar, pueden confundirnos más o menos con alguna aparición recién llegada del mundo de la ultratumba. Si nos maquillamos mal, con quien probablemente nos confundirán es con cierto tipo de señoras que, con todos mis respetos, se ganan la vida en clubs de alterne, o en esquinas en su defecto.

LA ODIADA VÁSCULA
Nuestro peso es uno de esos aspectos que más quebraderos de cabeza nos lleva a las personas preocupadas con nuestra propia estética. Si para colmo hemos pasado nuestra infancia como el típico niño gordito a modo de patito feo en medio de un ambiente hostil donde las calumnias verbales y no verbales eran el pan nuestro de cada día, y donde la típica panda de odiosas descerebradas, para aumentar su ego, te insertaron en el cerebro la creencia no fundamentada de que con tu físico a lo sumo ligarías con Steve Urkel, pues nuestra obsesión será incluso mayor. No obstante, todos los que se hayan sentido identificados con este breve resumen de la edad escolar sabrán que el tiempo es sabio y generoso con estas personas, y que un buen día de primavera, en medio del piar de las aves y de los dorados rayos de sol que se cuelan por la ventana de su habitación, una descubre que no es tan fea como había estado creyendo toda su vida, y que el espejo ya no devuelve la imagen de un patito feo, sino de un cisne que ahora aquellas energúmenas miran con desdén, pues con ellas el paso del tiempo no está siendo tan benévolo y lo que antes eran sus cuerpecitos de jovencitas en plena pubertad, ahora son troncos que comienzan a acumular lorzas de odio y dejadez.
Bueno, decía, tras esta digresión sobre mi propia edad de juegos, que nuestro peso es una de esas cosas que más nos obsesiona. Nunca pongamos el listón demasiado alto y nos empeñemos en igualar a Giselle Bundchen en cuanto a medidas se refiere: para ello tendríamos que volver a nacer. Lo que si es cierto es que cada persona posee un peso ideal: no todos estamos guapos cuando adelgazamos, y cada constitución física se ve más favorecida con unos kilos de más o unos kilos de menos. Por ello, perseguir la estética anoréxica que tanto se ha impuesto hoy en día es, no solo costoso, sino también poco acertado.
Lo que si se debe evitar a toda costa es el efecto yo-yo que puede dejarnos con unos cuantos pliegues de piel hueca. Lo mejor: comer siempre de todo, en su justa medida. Ceñirse a un planning de alimentación, a una dieta, y no saltarsela en la medida de lo posible. Las sucesiones comilonadeNavidad-dietadelaalcachofa-comilonadeNavidad-dietadelaalcachofa no solo acabará con nuestra silueta, sino también con nuestro hígado.
EL MOMENTO
Es de suma importancia el momento en el que nos veamos envueltos, pues no usamos la misma ropa para salir a hacer footing que cuando vamos de boda. Si bien hay gente que acostumbra, por ejemplo, a acudir a clases con tacones de aguja, dos dedos de maquillaje, un palmo de rimel y bolso de Carolina Herrera, no lo apruebo (aunque respeto). Cada situación requiere su conjunto, sin tener porqué dejar de ofrecer siempre nuestra mejor imagen. Por ejemplo, a clases podemos ir maquilladas y arregladas, pero con moderación, gusto y medida. Es muy recomendable un estilo "casual" para ello. A una cena podemos vestirnos más lujuriosamente, ser más generosas con el maquillaje y más atrevidas con los tacones, por ejemplo. No resultaría procedente tampoco ir a comprar leche al super en zapatillas de andar por casa, pero tampoco veo aconsejable bajar de punta en blanco, a no ser que nos veamos obligadas a hacerlo porque minutos después hayamos quedado con algún cañón.
Y hablando de cañones, en cuanto a las citas… ¡ay, las citas! Son objeto de tantos quebraderos de cabeza en cuanto a lo que se decide llevar que nos crea estados de ansiedad de nivel creciente al grado de atracción que dicho acompañante ejerza sobre nosotras. De antemano, ya digo que olvidemos tratar de convencer al otro que nos hemos puesto lo que primero hemos pillado, pues todos sabemos que nos hemos pasado horas intentando encontrar ese estilo cuidadosamente descuidado del que hacemos gala, y de nada sirve engañarnos y engañar a los demás. Vamos a pasarnos como mínimo dos semanas decidiendo lo que vamos a llevar, para después pasarnos otras cinco horas arreglándonos, y otras dos más comprobando delante del espejo que estamos presentando nuestro mejor aspecto. Suele ser recomendable tener una amiga/madre que nos aconseje sobre ello, pues la cita suele ofuscarnos de tal manera que casi nos cuesta pensar.
*Nota: los que hayan llegado hasta aquí sabrán que disfruto haciendo uso de la hipérbole.
ANTES MUERTA QUE … SIN DEPILAR.
Una de las peores cosas que puede hacer una mujer es salir a la calle sin depilar. Aunque llevemos ropa que cubra esas zonas donde no debería crecernos vello. Es un sinvivir que no recomiendo a nadie salir a la calle con pelacos en las piernas aunque llevemos los típicos vaqueros que cubren hasta el tobillo, pues pasas la mayor parte del tiempo pendiente de que ningún niño con malicia u objeto protuberante con la misma intención enganche tu pantalón y te obligue a mostrar contra tu voluntad esas piernas que se empeñan en competir con las de doña Rogelia a la mínima que nos descuidamos. Ídem con las axilas. Para peluquines sub-braquiales ya tenemos a muchos que yo me se, con la gran diferencia de que los hombres se lo pueden permitir. Dos zonas más hiper-mega-importantes que estas son el bigote y el entrecejo. De los que no acostumbran a depilar esta última zona han surgido diversas subespecies que solo nombraré y definiré: el Homo Sapiens Unicej (la ceja izquierda y la derecha forman una linea continua y tupida de manera que parecen tener una gran ceja) y el Homo Sapiens Tricej (posee una tercera ceja sobre su nariz a parte de las dos habituales cejas sobre sus ojos).
Muy importante también para las chicas es el vellito molesto del ombligo. Recomiendo depilar, aunque muchas se empeñen en decolorar con andina. Eso solo queda bien si es muy poquita la pelusita que nos crece. He visto auténticas pelucas teñidas de amarillo.
En cuanto a los chicos… Pues bueno, la depilación es un tema que les preocupa bastante menos, para que nos vamos a engañar. Según los rumores los metrosexuales optan por acabar con todo el pelo de su cuerpo excepto con el de su cabeza… Personalmente no considero estético toparse con un hombre que parezca un bebé recién salido del vientre de su madre, y el vello de brazos y piernas aumenta el atractivo de las extremidades masculinas. Pero para gustos, los colores. Ídem con el pecho. Por supuesto, aunque se opte por dejar un torso estilo-natural, nunca emular el momento "Mar Azul" del videoclip de aquel cantante del que ya casi nadie se acuerda llamado Cristian, donde dicho sujeto aparecía felizmente cantando en una playa "Nuestro amor es azul, como el mar azul…" mientras el pelo de su cabeza, de un rubio teñido, desentonaba escandalosamente con el pelo de su pecho, de un negro natural. Una de dos: o se lo teñía, o se lo arrancaba (tanto el del pecho como el de la cabeza, para igualar la cuestión)… Lo que ocurrió fue mucho mejor: se calló y nos dejó a todos vivir en paz, lejos de tamaña horterada.
No hablaré de una última parte de la anatomía que unos deciden depilar y otros no para no dotar a este texto de una vulgaridad de la que soy totalmente enemiga, aunque todos estéis pensando en ello.

LA LIMPIEZA ES MADRE DE LA BELLEZA
Y la paciencia es madre de la ciencia. Uno de los dichos preferidos de todas las madres que suele preceder a la frase que tanto les gusta pronunciar: "Ve siempre con ropa interior limpia, porque si te pasa algo estarás presentable". Da igual lo elegante que vayas, el dinero que te hayas gastado en tus pantalones de Carolina Herrera… bueno, vale… en tus pantalones de Mango… da igual que te hayas pasado toda la mañana maquillándote. Si te hueles, hueles. Y aquí no nos sirve la famosa frase de Jesulín "Callaos que no huelo", pues nuestro sentido de la vista o del oído no interfiere para nada con el del olfato, y aunque nuestros ojos estén contemplando la obra más hermosa que jamás se haya visto, nuestras narices pueden estar oliendo al mismo tiempo el hedor más apabullante que se haya encontrado. De nada sirve tampoco tapar nuestro olor corporal con perfume del caro o del potente. No hace falta ser Jean-Baptiste Grenouilli (protagonista de "El Perfume" con un olfato inverosímilmente privilegiado) para saber cuando dos olores se mezclan en el espacio y en el tiempo con la intención de confundir al otro haciéndole creer que vamos limpitos y duchaditos. Lo mejor: una buena ducha… que tampoco dos. Aprovecho para declarar que esa práctica que todos los pijos baratos con aires de superioridad suelen "decir" que llevan a cabo en verano de ducharse más de una vez al día es mala para la piel (aunque al tiempo que te lo están diciendo percibas ese olorcilla a cebolla cruda).
Y por supuesto… ¡No nos pasemos con el perfume del mismo modo que no nos pasamos con el maquillaje! Si no queremos que nos sigan los insectos confundiéndonos con apetecibles flores productoras de néctar dulce, con una o dos aspersiones de nuestro perfume favorito suele ser suficiente, a lo sumo tres si es un olor muy suave. Todos hemos pasado por algún sitio donde ya no se divisa a nadie en las inmediaciones, pero cuyo ambiente está todavía impregnado en alguna imitación de escaso presupuesto del famoso número 5 de Channel.
DIME A QUIEN IMITAS Y TE DIRÉ QUIEN ERES.
Muchas veces es divertido ir por la calle y comprobar que cada persona parece imitar a alguna diva o creadora de tendencias de las que suelen aparecer como mejor vestidas, y a veces como peor. Aquí algunas de las más frecuentes.
Marilyn: son poco habituales las imitadoras de esta musa si nos encontramos en la calle corriente, pero parece tener muchas admiradoras en la alfombra roja. Scarlet Johanson suele seguir su estilo acertadamente. No lo hacen Cristina Aguilera o la exmujer de Marilyn Manson de cuyo nombre no quiero acordarme.
Audrey: ya citada anteriormente, es una de las más imitadas. Aunque la mayoría de admiradoras fracasan en el intento.
Paris Milton: en el polo opuesto de las dos anteriores, pero tristemente igual de imitada. Aunque a veces la rica heredera lleva ropa igual de cara que bonita, el perrito colgado de su brazo vaya a donde vaya suele estropear esa imagen por acertada que haya sido en ese momento. La mayoría de las veces no deja de ser una Juani-con-dinero.
Amy Winehouse: personalidad no le falta. Y la respeto y le hago una reverencia por ello. Pero se ha ganado a pulso el doblete en las listas de 2008 llevándose el primer premio de las peor vestidas y también el de las peor peinadas. Aunque sus atuendos podrían aceptarse, los gigantescos tatuajes que estampan su piel son una ofensa para la vista. No obstante, ya me he topado a unas cuantas con cardados peinados, rayas donde se deben haber dejado un eyeliner completo, y cinturones de charol rojo bastante inconfundibles. Aprovecho para mandar un consejo a todos sus seguidores, y a ella misma si fuera a leer esto: las drogas son maaaaaalaaaaas. La vida se disfruta el doble cuando tus cinco sentidos están a pleno rendimiento. Ejem, ejem.
Emmy Rossum: mi musa a seguir en cuanto a estilismo se refiere. Es poco conocida, pero su armario es uno de los más envidiados por mí. Sus vestidos de corte romántico y femenino causan en mi incontenibles tendencias cleptómanas, pues no tengo el dinero suficiente ni para comprar la orilla de alguno de ellos.
Penélope: pssss… A todos les ha dado un extraño arrebato de euforia, cuando yo la veo como de las más normalitas e impersonales vistiendo. La crítica alabó el peinado y vestido que llevó a los Oscars 2007, un Dior crema elegido en el último momento cuando su primera opción se había escalabrado. A mí no dejó de parecerme una treta publicitaria, y el recogido y Channel negro que llevó a los 2008 me parecieron infinitamente mejor. Subió nota este año con el vintage de los 60. Aún así, sigo opinando que carece del carisma que una creadora de estilo debe poseer.
….
….
Mmm…
......
.......
Me doy asco a mi misma… No creí que fuera a caer tan bajo, hablando de la ropa de los famosos como cualquier reportero del corazón, cánceres del buen periodismo y de los artículos de opinión.
Ejem… acabemos… ejem

Y TU PERSONALIDAD, lo más importante.
Por supuesto, faltaba este mi mayor y más sincero consejo: se tú mismo. Viste como te de la real gana haciendo caso omiso a lo que te diga la gente. Nada de lo comentado hasta ahora tendrá valor si somos simples loritos repetitivos que vestimos la moda al pie del cañón. No olvidemos que nuestra indumenta es como nuestra carta de presentación hacia los demás, que es una forma de expresar lo que llevamos dentro y que se debe ajustar a nuestra personalidad. No demos la satisfacción a los imbéciles descerebrados y enalienados que visten de forma clónica de ser como ellos. Se tú mismo, y que los demás no te quiten el sueño. Si nuestra vida tiene tantos contratiempos que es imposible ser dueño por completo de ella, cojamos firmemente las riendas de aquello que sí podemos controlar. Y nuestra forma de vestir es una de esas cosas. No la dejemos al libre albedrío del prójimo. Nuestra personalidad es uno de los regalos más agradables que se nos da al nacer, aunque algunos renieguen de ella y traten de confundirse con la masa.


Fdo: Angelar la Fashionable

PD: Se aceptan críticas, sugerencias, proposiciones (decentes)… también indecentes… xxxxDDD
(No he podido evitar citar al gran Andy, ejem y más ejem!)
PD2: Próximamente más paranoias…

2 comentarios:

  1. proposición indecente? donde? cuando?
    ...
    ahora en serio, de lo unico en lo q voy a opinar de aqui es de lo unico q me concierne como chico. Hablas de la depilación en los hombres como un todo o nada pero nuestras opciones no se reducen a eso. Yo no me depilaria el cuerpo ni aunque me sustituyeran toda la sangre x alguna droga sometedora de la voluntad xDDDDDD, ahora q si q me arreglo los brazos (me corto el pelo con tijeras y me echo algun potingue decolorante xD) de hecho ahora los tengo de hace relativamente poco tiempo. Es igual q el pelo de las piernas, q no me lo depilo (ya lo hice una vez y queda horrible aparte de dar muchos problemas) xo en verano lo corto dos o tres veces, no por la cuestion estetica si no xq si no me resulta un infierno llevar pantalones cortos u.u (me esta pegando pellizcos tol rato con las costuras de la orilla). En fin eso, xo claro todo depende de la persona a fin de cuentas, ya q yo siempre he sido un hombre lobo y tengo pelos en tos laos xD (menos en la espalda x suerte).
    jaja y de lo demas no te digo nada q tu ya sabes mi opinion xD
    pd. y q diablos es ese foro??????xDDDDD me asuste al darle al link xD

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  2. angelar la efeeeeeeeee no sabia que tuvieses un blog *-*
    me encanta espero seguir leyendo tus consejos de moda *-* sigue asi y seras nombrada estilista de la congregación *-*

    besitooooos dorados

    PD: Para el chico del coment de arriba ... ejem ejem.. ese bonito link al que le has dado es algo que hará historia, asi que yo te aconsejos que te unas al proyecto antes de que todos quieran entrar y no queden plazas en la congre

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